cristino

Más leemos que nunca, sí

El tema este de la lectura siempre da mucho juego, para unos y para otros. Todo el mundo ve razones para justificar sus opiniones. Quienes quieren pensar que cada vez se lee menos lo consiguen gracias al alto indice de fracaso escolar y mirando el descenso de la venta de diarios por ejemplo.. Si uno tiene que renunciar a algo reduce sus gastos en cultura. No dejará de hacer sus vacaciones de toda la vida, si es preciso se aloja uno en hoteles baratos.  Quienes quieren pensar que los que leen siguen leyendo se agarran a lo que aquí tenemos. Llueve a gusto de todos. Estamos de suerte, de fiesta, de ilusión y de futuro. Estamos.

La semana pasada se celebró el XXV Encuentro sobre la Edición en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en Santander, bajo el lema Un cuarto de siglo después: balance y perspectivas de la edición española. Al cierre de los cursos de verano y como conclusión, España está cerca, por primera vez en la Historia, de convertirse en una sociedad mayoritariamente lectora, próxima a los parámetros de lectura de otros países europeos. Una circunstancia que “debe ser consolidada y reforzada, en un esfuerzo común en el que deben seguir implicándose todos los actores sociales”, como así declararon los editores, reunidos bajo la dirección de Francisco Pérez González.

En concreto, nuestro país ha aumentado en torno a un 20% de la población en las últimas tres décadas. Mientras que en los años 80 admitía leer un 34% de la población, el último índice de lectura, el de 2008, casi alcanza el 55% de la población. Además, también es importante señalar que los grupos, por rango de edad, que más leen en España son los menores de 13 años y los jóvenes de entre 14 y 25 años.

En la mejora de los hábitos lectores se destacó «la labor extraordinaria y constante realizada por las bibliotecas públicas y también el compromiso de las Administraciones Públicas y, sobre todo, los Ayuntamientos, para potenciar la red de lectura pública, pero también el trabajo incentivador y pionero de algunas instituciones privadas», como es el caso de la Fundación SM, Lara, Santillana, Bertelsmann o Sánchez Ruipérez, líderes del sector editorial español.